Jamás imagine recibir una llamada así...definitivamente me tomo por sorpresa, como dicen en ingles "it came out of the left field".
Eran las 8:30 pm de la noche, cuando mi celular comenzó a reproducir JET LAG de Joss Stone, estire el brazo a tomar el cular y decía PAPÁ....un microchip hizo click en mi cerebro y susurro "Chesu y ahora, que paso"...estando a casi 750km de mi casa, me imagine lo peor, respire lento antes de decir el popular Alo!, mi viejo me dijo: Hijo que tal? como estás pasando las fiestas, yo respondí bien y ustedes, descansando la panza de todo lo que hemos comido respondió con un sonrisa escurriéndose entre sus palabras. Yo sólo atiné a añadir: bueno aprovecha, de allí te ponen a dieta. Pues si, acotó mi papá. Así que hice de tripas corazón y le pregunte: todo bien? mis abuelas? mis abuelos? y me dijo si, también descansando todo lo que han comido y tomado...y los chuckies por fin se durmieron después de haber jugado todo el día. A bueno, salvados, si pues replicó él, por fin a ver televisión tranquilos. Tranquilo hijo, que sólo te llamaba para saludarte, dijo serio y luego añadió algo que me dejo torombolo: el domingo 3 de Enero es cumple de César, así que tu mamá y yo queremos invitarlos a almorzar, así que te llamo de una vez antes que agenden salidas. Oh, gracias, le diré a César de una vez, y ya coordinamos en año nuevo. Sale, me dijo mi papá, un abrazo, nos vemos. Y corto. Yo me quede mirando el teléfono, con esa sonrisa boba que uno pone cuando te dicen algo inesperado.
Le dije a mi gordis, y el contento dijo: Es que soy el yerno favorito, comentario que mereció un codazo jajaja y seguimos con nuestra ajetreada visita navideña. Regresamos a Lima con un par de kilos de más, muchas nuevas anécdotas, y la felicidad de haber pasado la navidad en familia.
Llegó el 31 de diciembre, nos alistamos con tiempo de sobra, y llegó el momento de pedir el taxi. Taxi beat me choteo olímpicamente, ninguno en el área, asi que use Easy Taxi, la misma chola con otro calzón...una vez más easy taxi y al fin alguien se digno a llevarnos. llegamos a casa de mis abuelos, y el poder decir, a la altura del Británico de los Jardines volteas a la derecha se sintio tan familiar como extraño después de la ausencia del edificio que me recibió hace ya casi 8 años.
En fin, llegamos, saludamos, brindamos, comimos, reímos, y al despedirnos mi abuela le pregunta a César: el domingo es tu cumpleaños, no?, mi gordis asintió, mi abuela acotó, perfecto: entonces vienen a almorzar, que prepararé algo por su cumpleaños? me quede tonto, el también. Pedimos un taxi con el mismo drama de unas horas antes, y nos dirigimos a una reunión de amigos de César (ya les contaré los detalles en el siguiente post). Y bueno como es nuestra costumbre, siempre vamos tomados de la mano charlando y revisando los planes de la semana, cuando César me dice: no hay nada que hacer soy el yerno favorito, con esa sonrisa de niño con juguete nuevo, con diploma de honor de primer lugar y con estrellita en la frente...jamás pensé vivir estas cosas, siempre invito a mi familia a almorzar por el cumpleaños de mi gordo, pero este año, fueron ellos los organizadores, y eso me dice que como pareja, algo debemos de estar haciendo bien, o como dice César: es su premio por aguantar mis locuras, mis ocurrencias, mis mood shifts....yo sólo atino a respirar profundo y decirle: andá! Reímos y nos besamos.
Así que no nos quedo más que pasar el almuerzo con mis padres para el día de hoy, de hecho estamos aun recuperándonos de tan abundante y rica comida china. Gracias a mis padres, hermanas, cuñados, hermano, sobrinas y sobrinos. Veremos como terminamos mañana!