viernes, 23 de noviembre de 2018

Narcosis


Se mecen mis pensamientos lento,
Suave como bailando un vals gótico,
Se ha disuelto la duloxetina y la oxicodona…
Y entonces me hallo a mí mismo,
Entonces por un momento soy libre,
Por un instante siento el sol y el viento,
Puedo sentir mi piel toda como primavera,
Entonces puedo ver como el mundo se mueve ligero,
Entonces el entumecimiento de mis versos aminora,
Y puedo pensar en cosas bellas,
Puedo ver con recelo los cuchillos que guardo bajo la cama,
Entonces me siento humano,
Mis emociones flamean como cortinas de tul en ventanas abiertas,
La vida recorre todo mi ser y siento mis propios latidos,
Siento como la calidez regresa a mis piernas,
Siento como la inquietud galopante florece en mis caderas,
Entonces te deseo,
Entonces estoy listo para sentir tus manos,
Para ensordecer en los murmullos de tus labios,
Entonces soy libre aun cuando me tengas sujeto muy cerca de tu cuerpo,
Sólo cuando los narcóticos se diluyen por completo,
Y se siente todo el cuerpo como invadido por hormigas,
Que van marchando presurosas
Desde mi nuca…avanzan con ánimo, sin conocer su destino,
Marchan hasta perderse en la punta de mis dedos,
Entonces vuelvo a ser yo mismo,
Aunque sea por unas horas,
Aunque sea hasta que tu libido se evapore en un te amo,
Y luego todo quede en silencio,
Un silencio misterioso y hasta intimidante,
La calma, la hora de volver a rellenar mi cuerpo de oxicodona,
Y sea sólo un títere de carne y hueso,
Deambulando por un mundo que parece en pausa…
Esperando que el efecto pase
Y regrese al altar que es nuestra cama,
A profesar el credo que son nuestros cuerpos amándose,
Repitiendo este ciclo narcótico una y otra vez.


Un minuto más


Este sueño borrosos de versos y de ayahuasca,
Esta sensación de opio fresco diluyéndose entre mis neuronas,
Esta sensación de amapolas floreciendo conforme doy un paso,
Está sobredosis de “tramadol” bien calculada me permite recordarte con más detalle,
Me permite casi sentir tus besos,
Saborear esos encantamientos silenciosos
De tus labios dulces,
De tus labios voraces…
Siento la soledad de la montaña volviéndose un vórtice…
Y entonces te extraño aún más que a mi cordura,
Y se me va enfriando la piel toda,
Y procuro disimular con toda mi fuerza,
Procuro serenar mis pensamientos caóticos,
Mis anhelos suicidas,
Y me abrazo a mí mismo,
Me estrujo como un acordeón roto,
Uno al que el aire lo ha abandonado,
Uno al que la música es sólo un vago recuerdo,
Fijo mi mirada donde yace tu nombre grabado en piedra,
Y siento que esta paz tan reconfortante de las montañas,
(la que siempre amaste)
Me da urticaria…
Como me gustaría contar tus cabellos en lugar de las hojas
Desprendiéndose de este manzano que se ha rendido al tiempo,
Y se deja caer de a pocos sobre esta roca fría que lleva tu nombre,
Esta paz…este silencio de las montañas
Me duele,
Como astillas debajo de las uñas,
Como quisiera poder estar en la cama,
Oírte respirar con entusiasmo,
Rendido después de los labores que impone la lujuria y el deseo,
Quisiera sentirte caliente sobre mi cuerpo,
Como una fogata bien alimentada,
Como quisiera estar en la cama,
Maquinando los movimientos reptilianos de mis piernas entre las tuyas,
Como quisiera estar a tu lado,
Imaginando que el mundo es perfecto,
Que somos eternos y no etéreos,
Como quisiera poder retroceder el tiempo,
Hacer girar las manecillas del reloj a la inversa,
Te hubiese dicho tantas cosas,
Te hubiese dicho que en verdad te amaba,
Y ahora solo puedo susurrarlo entre sollozos,
Sobre la lápida de piedra pulida…
Como quisiera verte aunque sea una vez más,
Y quedarme prendido en tu mirada
Sólo un minuto más…sólo uno más.


miércoles, 21 de noviembre de 2018

Rendición

Yerma…así está mi mente…
Las rimas se han secado en el invierno de los años,
Las doncellas que cantaban a la luna llena,
Y le dedicaban rimas a la diosa,
Son hoy día todas una viejas achacosas,
Y ahora solo susurra canticos fúnebres,
Un salmo que sabe a nieve,
Un llanto asolapado que sabe a final anticipado,
Una confesión de todos los pecados,
Un ruego por el perdón de los mismos,
Yerma…así está mi alma,
Desolada, adolorida, enclenque sosteniéndose a duras penas,
Aferrándose obstinadamente a esa sonrisa que un día tuve,
Y hoy se desprende como pintura mohosa
De las paredes de esta casa que es mi cuerpo,
Yerma…así está mi vida,
Como un haiku sin alma,
Resignada a lo que venga,
Como quien grita pidiendo auxilio sabiendo que nadie oye,
Que nadie responderá…
Yermo…
Así está mi destino,
Ya nada tiene sentido,
Solo el dolor que se siente como clavos en un muñeco vudú,
Solo el ardor que se siente como azotes esclavistas,
Solo la penuria como de huesos raídos,
Solo el deseo de una muerte…
Yermo…
Así se siente mi destino,
Ya nada tiene sentido,
Así que dulce muerte…ven que te espero…
Con los brazos abiertos y sin resentimiento,
El reloj suena pausadamente cucú, cucú, cucú,

Y mi corazón suspira: ya no puedo más.

Dolor

Y se han ido mis rimas como mariposas asustadas,
Las persigue el invierno,
Como a mí me persigue la muerte,
Quisiera poder decirte que estoy bien sin mentirte,
Quisiera sonreír sin tener que esforzarme,
Quisiera poder agradecer cada día en que respiro,
Pero todo duele,
Como una lija repasándose con coraje sobre un portón viejo,
Todo quema como si la piel la acariciase un carbón encendido,
Las costillas se sienten tensas como cuerdas de una citara a punto de romperse,
Entonces falta el aire,
El corazón se agita como un cascabel en la cola de una serpiente,
Y mi garganta se seca como aspirando humo…
Quisiera poder mirarte a los ojos sin procurar que no veas en ellos,
Como duelen las plantas de mis pies como si las frotase con vidrio molido,
Como duelen las pantorrillas como si las masajeara con anzuelos oxidados,
Tratando de pescar filamentos para tejerlos en un macramé macabro,
Quisiera poder besarte,
Y dejar que me abrazases toda la noche sin sentir que mis articulaciones,
Son reemplazadas una a una, lentamente y sin anestesia,
Quisiera poder disfrutar de la peregrinación de tus labios y tu barbilla,
A lo largo de mi espalda,
Sin sentir que mis vertebras las atornillan simultáneamente,
Quisiera poder pedirte que me toques,
Que me acaricies,
Pero todo duele, quema, arde, y se siente como desgarrándose,
Quisiera poder agradecer un día más a tu lado,
Pero a veces lo único que anhelo es que todo acabe,
Que mi pecho se comprima tanto que el aire me abandone,
Que la sangre detenga su recorrido como detenida por un dique,
Hay días en que sólo anhelo que llueva para llorar con mayor disimulo,
O cerrar los ojos y nunca más abrirlos…
Sí, estoy deprimido…lo sé…
Y aun cuando crujo como una hoja de aluminio arrugándose con malicia…
Tú me amas…lo sé…
Pero todo duele,
Y a veces olvido que la mañana puede cantar de manera hermosa,
Que la noche puede danzar de manera hipnotizante,
Como una vela encendida en la sala,
Como tus pupilas cuando me miras…
Y a veces olvido que quiero vivir mucho tiempo más a tu lado,
Y es que todo duele,
Como látigo hecho de ortiga cayendo despiadadamente,
Una y otra vez, y otra vez más…todo duele,
Y te amo,

Pero a veces ni eso es suficiente para querer seguir viviendo.

Pronto

Y se cuela por entre la puerta la desesperanza,
Ese sueño destartalado de niñez…tan pulcro, tan inocente…
Bienvenido sea el invierno,
A este lecho vacío,
A estas piernas sosas,
A este pecho inerte…
Bienvenido sea el invierno,
Sin pompa en esta noche de canticos fúnebres,
De tambores de cuero arrugado,
De panderetas oxidadas,
De un canto que en la noche del tiempo se volvió un ruego,
Una súplica estúpida,
Un anhelo vano,
Él no volverá,
Y aunque el tiempo haga girar el sol y las estaciones
Se sucedan otra como soldados en campaña,
Él no volverá,
Allí a la sombra de un sauce quejumbroso,
Estará inerte cual crisálida embalsamada,
Esperando a que la muerte me visite,
Y por fin volvamos a estar juntos,
Como el alma en el violín, como el “tsume” y el koto…
Y mi voz amargada como una metralleta oxidada,
Pueda volver a ser fuerte y clara,
Como las vocales en un: te amo…
Espera un poco más…pronto nos volveremos a tomar de las manos,
Pronto nuestras miradas se cruzaran de nuevo,

Y enroscadas como hélice de ADN, nos quedaremos.

martes, 20 de noviembre de 2018

Compromiso

No tienes porque asomarte con disimulo,
Se que estas allí, que nunca te has ido,
Y a decir verdad aprecio eso en ti… la constancia,
Ven toma asiento,
Perdóname si la casa está desordenada,
Perdona si no preparé más mate,
Y ahora, por dónde comenzamos?
¿Te cuento todo lo que he hecho en estos meses?
Y pretender sorprenderte,
¿ O dejo que me narres con disimulo como te has ocultado a mis ojos,
Como escondiste tu aroma tan sereno y seco como sexo con desgano,
O como caminabas a hurtadillas para que no sintiese tus pasos
De acosadora maniática?
Nos conocemos desde hace tanto,
Y a decir verdad te aprecio como parte de mi familia,
Quizás no como una hermana, pues eso implicaría ser iguales en cierta forma,
Más bien como una madre, un tanto trastornada pero siempre hacendosa,
Siempre dispuesta a oírme, a acariciar mi cabello cuando me tumbo en la cama rendido,
Ay, que haría sin ti, querida soledad,
Sin tu aliento frío y locuaz, sin tu gracia genuina…
Supongo, que no sería quien soy sin haberte conocido,
Supongo que ni siquiera me reconocería si no te hubiese conocido…
¿Qué hubiese sido de mi?
Y es que a veces nada tiene sentido si no es contigo…
Ay, soledad… menudo dueto hemos formado,
Menudas escapadas de esta ciudad hemos protagonizado juntos
Huyendo de su regio gesto de asco y pedantería…
Compartiendo miradas secretas, gestos, rimas y hasta ganas suicidas,
Ay, soledad… abrázame muy fuerte, que esta noche tengo frío,
Y sueño… sólo déjame dormir un momento,
Y luego continuaremos nuestra charla o quizás un plan maquiavélico,
Después de todo no sería la primera vez que sugerimos como poder estar juntos
Sin que nadie se atreva a decirnos… que lo nuestro no es sano.

jueves, 15 de noviembre de 2018

Oye

Oye como mi corazón late,
Con suaves latidos
Como un tambor envejecido,
Como si el invierno hubiese cuarteado el cuero,
Como un canto ritual a la medianoche,
Como una pira funeraria extinguiéndose,
Como el ulular de un búho asustado…
Oye como mis piernas gimotean penas antiguas,
Como se estremecen con angustías mundanas,
Como tiemblan mis rodillas
Cansadas por llevar a cuestas tantos pecados,
Oye como mis brazos se deslizan en el viento,
Como rimas tímidas,
Como el sol de otoño entre las hojas resecas
Del roble, del pino y del olmo,
Como acordes desafinados de un violin viejo…
Oye como confieso que soy tuyo,
Que no concibo respirar otro aire que no sea el tuyo,
Que no me veo caminando en esta vida…sin sujetar tu mano,
Sin voltear a un lado y saber que estás a mi lado,
Oye como confieso que soy tuyo,
Que aun después de tantos años,
Me parecen encantadores tus ojos caramelo,
Con esa veta verdosa como el prado más fresco,
Oye como confieso que te amo,
Y que aún después de tantos años,
E gusta derretirme en tus dedos,
Enredarme como hilo travieso entre tus piernas,
Que me gusta acariciar tu piel toda,
Garabatearla con mis labios,
Como se garabatea una hoja dibujando corazoncitos…
Oye como me confieso tuyo,
Como la intención pura de un rezo,
Como la melodía de una canción sin tiempo y sin espacio,
Oye como confieso que te amo,
Ayer, hoy y siempre
Y hasta que la vida me abandone
Con la misma sutileza que mi cordura…
Ven, oye esta confesión que es un salmo,
Este: te amo, que es un poema entero,

Este: soy tuyo, que es sincero.

Siempre

Y se escuchan canticos tribales,
Las manos aletean en el aire,
Las panderetas cascabelean,
Los ojos se cierran,
Entonces ese ruego que late se vuelve un salmo,
Y ese salmo una canción hermosa,
La primavera llega lenta,
Y mis caderas la perciben fresca,
Me meneo con delicadeza,
Mientras mis rimas se agitan como tambores de guerra,
Ven y tócame que estoy sereno,
Ven y tócame que ya no tengo miedo,
Que mis pensamientos son traslucidos como rio gélido,
Ven y tócame que soy tierno como la tierra húmeda,
Como esa súplica que uno susurra de niño,
Antes de dormir,
Ven y tócame,
Siente esta melodía de tierra y agua que vibra en mis piernas,
Ven y tócame,
Siente esta melodía de fuego y aire que galopa sobre mi espalda,
Ven y tócame,
Ahora que mis ojos están cerrados como reciento sacro
No hay mal en esta vida si siento tus manos deslizándose sobre mi cuerpo,
Como cuando el pasto esta verde y crecido,
Ven y tócame,
Y veras que mis gemidos son más dulces que el cascabeleo
De las llamas de la fogata,
Ven y tócame,
Y veras que soy tuyo,
Como la vida es de la madre tierra,
Como la música es de la noche,
Como la magia es de las brujas,
Como la sabiduría es de la diosa…
Ven y tócame,
Y prometo amarte sin miramientos,
Como de verdad se ama,
Como siempre hemos deseado,

Como siempre hemos anhelado.

Insane

Fuck…
¿Quién carajos las dejo libre?
Who let them out?

¿Quién abrió esa caja de pandora?
¿Quién se atrevería a darle la llave de la jaula
a estas maniáticas y frenéticas,
a estas reinas travestis de Disney?
¿Quién las dejo salir del encierro antes de podrirse
contándose cuentos insulsos las unas a las otras?
¿Quién dejó que ellas se apoderarán de los cuartos vacíos de mi mente?
Who the fuck could do something like that?
ahora sus musicales ridículos llenos de estúpida rima suicida
se lleven a cabo sobre las alfombras persas de mi imaginación,
¿Quién dejó salir a las bailarinas adictas a la heroína
para hacer splits en la sala de mi alma?
¿Quién dejo que todo este caos que creí haber atado con antipsicóticos?
¿Quién dejo que estas voces volvieran a resonar fuerte?
cara que retumben en mis huesos y cartílagos
como un himno mortuorio mal ensayado y hasta desentonado,
¿Quién las dejo acercarse a los cerillos?
¿Quién les vendió gasolina?
ahora todo arde en mi cabeza,
sus susurros se mezclan con las chisporroteantes flamas del caos,
entonces todas ellas como conjurando un tango maléfico,
de reas al fin libres…si libres para volver a apoderarse de mí,
de este reino que es mi psique…
ahora todo está desordenado como cama después del sexo,
ahora todo duele como una tortura china,
como un latigazo en la espalda,
como el escupitajo de una madre rechazando el fruto de su vientre…
y las rimas se vuelven ariscas y ponzoñosas ramas de ortiga,
y mis miedos van tomando forma asesina…
las reinas de Disney se vuelven femme fatale en mis pensamientos,
de Gothel a Malefica, pasando por Cruela y Ursula,
todas en traje de látex, outfits sadomasoquistas…
están listas para ver cómo me pierdo en mi propio cuerpo,
como muerdo mis propias palabras como galletas de perro,
como entierro mis temblorosos sueños,
como me meo encima de mis simples ambiciones,
ellas están listas para torturarme hasta que este listo para la manzana envenenada,
la fruta llena de clonazepan y duloxetina y la mastique como blanca nieves rechoncha,
y las escolte a lo largo del camino de ladrillos amarillos,
y luego me sacrifique con hojillas oxidadas garabateando mis muñecas,
y los pinte de rojo…de rojo manzana madura y puedan ofrecerle
el fruto inerte de mi pecho a la reina malvada…
quién las dejó salir?
fue tu beso mustio…
fue tu voz diciendo adiós…
fue mi cordura infartándose cuando me dijiste…ya no te amo…
me fui al carajo…
I’m insane!!!!

Fuck..
Just fuck…

I wish I believed in God, so I would ask for mercy!

domingo, 4 de noviembre de 2018

Espera

Y comienza la noche con un susurro,
Como alguien royendo las paredes desde dentro,
El silencio se hace agudo,
Y de pronto el cuarto se siente pesado,
Como si la gravedad aumentase repentinamente,
Y siento sus miradas en mi nuca,
Siento como las sombras se arrastran lentamente
Y es fácil advertir como sus cuerpos semi-corpóreos
Se contorsionan en las esquinas,
Emitiendo crujidos acuosos...
Como vértebras dislocadas volviendo a su posición primaria,
Y aunque no quiero,
Cierro los ojos y el sonido se hace más agudo,
Como un pequeño taladro dibujando surcos en huesos…
Y sólo me queda aferrarme a esa tibia sensación en mi pecho,
Tratando de contar mis latidos
Como cuentas de un Japa Mala, susurrando los ciento ocho kleshas,
Mientras mi piel se eriza con este tan natural miedo humano,
Y entonces le pido a mi cerebro que se calle…
Y procuro que el sonido de mi voz trémula y suplicante,
Rivalice con el sonido gutural de sus gargantas,
Y el leve sonido húmedo de su saliva cayendo al suelo…
Aquí recostado sobre el suelo,
Rodeado de la luz enclenque de unas velas consumidas a medias
Y el círculo granuloso de sal y tiza
Que los mantiene a raya,
Como un cerco electrificado entre la bestia y la presa,
Espero, rezando y cayendo en lapsos de sueño entrecortado,
Espero…a que la mañana se descuelgue pronto en el este,
Y estas formas antropomórficas se diluyan como un mal sueño,
Tan sólo para tener unas horas de vida
En que todo se queda en pausa…
El tiempo, el mundo, mi vida,
Y sólo cuando la medianoche lama nuevamente el cielo,
Tenga que preocuparme por ellos,
Tenga otra contienda,
Hasta que sus voces no puedan ser censuradas,
Por más fuerza que ponga en mis mantras…
Hasta que sus miradas me llenen de tanta culpa
Que la muerte sea un dulce premio después de tanta espera.

It's time

I've lived and loved, I've hugged and kissed, I've done my duty, I've paid my dues, I've erred and also made amendments,...