Ha pasado el tiempo,
Presuroso como la vida,
Adolorido como mis ideas sin sentido,
Como estos días tontos,
En los que me recuesto solo,
Sin sentir el roce de tu cuerpo,
Y quisiera tenerte aquí cerca, muy cerca,
Casi aspirando mi vida con tus labios suaves rozando mi cuello,
Con tus manos inquietas garabateando las lisas páginas que son mi
espalda,
Quisiera que estuvieses aquí conmigo,
Para poder disolver esta ansiedad que me muerde las entrañas,
Que me rasga desde dentro,
Me siento tan ligero sin tu aliento susurrando mi nombre,
Sin tu ser enterrándose en el mío,
Como la esperanza en los corazones tiernos,
Quisiera que estuvieses aquí conmigo,
Para susurrarte todo lo que siento,
Para dejar que mis piernas acróbatas
Te demuestren que son tan versátiles como mis palabras,
Pero no estás,
Y quizás nunca vuelvas,
Te fuiste…
Y aun cuando la cama se haya enfriado,
Y tu aroma se haya disuelto como el de una flor mustia,
Yo te recuerdo,
Yo te necesito,
Yo te extraño…
Quisiera que estuvieses aquí a mi lado,
Y poderte decir lo que debí y no me atreví…te amo,
Si, te amo…
Soy tuyo, y así quiero serlo siempre,
En esta y en todas mis vidas futuras,
Quiero ser tuyo,
Ojalá estuvieses aquí a mi lado,
Ojalá te hubiese dicho lo que sentía,
Muy tarde amase valor en mis labios,
Y te fuiste sin saberlo…
Pero, en verdad te amo.
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